El Grupo Popular desmonta los falsos argumentos del Alcalde

El Pleno ordinario celebrado el pasado jueves ha vuelto a evidenciar la política de golpe encima de la mesa y de promesas que no pueden cumplir el Partido Socialista, política muy contraria a la que predicaron durante la campaña electoral. El Alcalde y su equipo de gobierno se han dedicado en los últimos días a deslizar informaciones sesgadas sobre la necesidad de realizar una modificación en los presupuestos, con la intención de sembrar el pánico entre los vecinos de Abanilla. Sin embargo, apenas un día después, el propio Alcalde se desdecía en el Pleno al reconocer que había sido informado por el anterior regidor del consistorio de la existencia de facturas pendientes de pago por quedarse sin consignación presupuestaria y que por tanto no estaban escondidas en cajones ni en ningún otro lugar, como afirmaba el propio Alcalde un día antes en el diario La Verdad.

El Grupo Popular Municipal votó a favor el pasado jueves la medida propuesta por el gobierno local de realizar una modificación de crédito al entender que es algo positivo para nuestros vecinos pero ha discrepado de su exposición pública. Esta medida  es una práctica totalmente habitual cada año ya que los presupuestos iniciales son estimaciones que luego pueden variar con el transcurso del año y sin embargo ha sido vendida como una medida excepcional intoxicando que el Ayuntamiento no disponía de dinero para acabar el ejercicio. Lo que tampoco cuenta el PSOE de Abanilla es que esa operación de modificación de crédito, es decir, coger el dinero que sobra en unas partidas para dotar de liquidez a otras con falta, se puede realizar con facilidad porque existía una partida sobredimensionada gracias a la gestión del anterior gobierno del PP que consiguió un año de carencia en uno de los préstamos que tiene vigente y además dicha modificación es de una cantidad tan pequeña que solo  afecta a un 10% del  total del  presupuesto. La anterior portavoz socialista, esposa del actual alcalde, era y es conocedora de la situación económica del Ayuntamiento y de los distintos planes de reequilibrio efectuados durante la pasada legislatura. Es por eso que sorprenden las manifestaciones y quejas de nuestro alcalde sobre su desconocimiento de las cuentas del Ayuntamiento.

El Grupo Popular le hubiera gustado darle 100 días al nuevo gobierno pero no podemos consentir que el actual Alcalde y su Portavoz Municipal vayan a más de una mentira por pleno. El actual dirigente del consistorio ha acostumbrado a los vecinos a vender humo en sus intervenciones prometiendo cosas que sabían de sobra que no podrían cumplir y a ponerse la venda antes de la herida por miedo al fracaso. Ahora la incapacidad del Alcalde para tomar medidas de lo más habitual y corrientes en el devenir de un Ayuntamiento pretenden ser enmascaradas con más mentiras a los vecinos y con el argumento fácil de ‘la culpa es de los de antes’. Pero lo cierto es que ellos, al igual que nosotros, sabían de la realidad del consistorio por medio de la anterior portavoz y en el supuesto de que no la hubiera conocido  porque no les informó, eran muy temerarios y negligentes al prometer a los abanilleros sin ni siquiera molestarse por conocer la realidad de los presupuestos locales.

El Partido Popular apostó por una campaña sincera, coherente, con rigor y de mirar al ciudadanos a la cara y contar lo que había porque sabíamos de la dificultad de la situación a la hora de cuadrar unos presupuestos muy limitados por la Ley de Control Presupuestario impuesta desde el Ministerio. El PP nunca ha prometido lo que no puede cumplir porque es nuestra responsabilidad hablar al ciudadano con sinceridad y claridad, por dura que sea y aunque no guste, porque está en juego el presente y el futuro de Abanilla.

Es preocupante la insistente mentira y los incumplimientos en cada toma de decisiones que el Sr. Alcalde y su equipo de gobierno realizan en este corto periodo de tiempo que llevan gobernando. Y lo curioso y digno de recordar es que la mayoría de las decisiones que toman tienen poco o nada que ver con las promesas ‘cantadas’ por el Alcalde en sus actos electorales. Está política de engañar es la misma que tan bien les ha funcionado con el vertedero al anunciar en campaña, poco menos, que se avecinaba algo parecido a un cataclismo nuclear y de sobrevolar la muerte alrededor de ese vertedero. Ahora la presión ejercida sobre la mercantil nos obligará a tener que desviar nuestros residuos a otro lugar con su correspondiente coste adicional no presupuestado.

Y es que, como manifestó el Grupo Popular Municipal en el Pleno del jueves, la realidad a día de hoy sobre este tema es que:

El vertedero sigue ahí. Sin posibilidad de trabajar y por tanto sin posibilidad de restaurar la Sierra de Abanilla. La empresa no ha soportado más la presión ejercida sobre ella y ha decidido lo más sencillo para una mercantil, ante la imposibilidad de trabajar, cierro y espero acontecimientos. Ante esta situación de cierre temporal el Ayuntamiento tenía un abanico amplio de posibilidades pero ha tomado el camino fácil: buscamos donde llevar la basura y si se paga más de la cuenta, ya buscaremos quién lo paga, nos tememos que los vecinos de todo el término de Abanilla pagarán este despropósito.

Por último, el Grupo Popular municipal presentó una moción sobre la nueva Ley Electoral al entender que es posible realizar una serie de consultas para enriquecer el texto de la norma que marcará las reglas del juego para las próximas elecciones autonómicas. Con esta moción se pretendía buscar hacer una Ley más consensuada de todos y para todos, por supuesto, el grupo socialista voto en contra, una vez más incumpliendo su promesa “cantada” de que llegaría la trasparencia y la participación al municipio de Abanilla, otra oportunidad perdida por el PSOE de Abanilla.

Publicado en Elecciones 2015.